Fox Hunt: redefiniendo el multijugador en Metal Gear Solid Delta: Snake Eater
Número de jugadores competitivo: Por confirmar
Número de jugadores cooperativo: Por confirmar
Fox Hunt es un modo multijugador completamente original, alejado de lo que conocíamos en Metal Gear Online. En este modo, los jugadores debemos utilizar el sigilo y el camuflaje como herramientas principales, en lugar de depender de tiroteos masivos. La jugabilidad se centra en la
tensión constante entre esconderse y acechar al enemigo, lo que nos obligará a usar el entorno de manera estratégica. Según
Yu Sahara, director del modo, el objetivo es llevar el concepto de
supervivencia y sigilo al siguiente nivel, creando una experiencia única dentro del universo de Metal Gear Solid Delta: Snake Eater.
Mecánicas y enfoque del modo multijugador
A diferencia de los modos tradicionales,
Fox Hunt nos desafía a utilizar el entorno para
desaparecer entre la vegetación, usar trampas y acechar a los rivales. La IA ha sido diseñada para reaccionar de manera más realista, lo que significa que los jugadores debemos pensar cuidadosamente cada movimiento. Uno de los aspectos más destacados del tráiler es la implementación de
escenarios con clima dinámico y ciclos de día y noche, que afectan directamente a la visibilidad y a las posibilidades de camuflaje. En
Fox Hunt, no basta con esconderse: debemos
leer el entorno, anticipar los movimientos enemigos y usar trampas para sobrevivir. La inteligencia artificial ha sido rediseñada para reaccionar de forma más orgánica, lo que nos obliga a pensar cada paso con precisión. Además, se ha confirmado que el modo incluirá
misiones cooperativas y enfrentamientos individuales, lo que garantiza una experiencia variada y rejugable. Cada partida será única, ya que las condiciones del entorno y las decisiones tácticas de los jugadores alterarán el desarrollo del combate.
Mecánicas clave del modo Fox Hunt en Metal Gear Solid Delta: Snake Eater
En
Fox Hunt, la esencia de la jugabilidad se basa en el
sigilo asimétrico. Los jugadores tomamos el rol de distintos operativos con habilidades especializadas, dentro de un mapa de gran tamaño con múltiples rutas de infiltración. El equipo atacante debe localizar y eliminar un objetivo o extraer información crítica, mientras el equipo defensor intenta frustrar la misión utilizando sensores, trampas y patrullaje. No se trata solo de movernos con cautela: debemos leer el lenguaje del entorno para detectar huellas, ramas rotas, respiraciones delatoras e incluso sonidos ambientales alterados. Este nivel de detalle convierte cada movimiento en una decisión táctica.
Herramientas de camuflaje y entorno dinámico
Cada jugador puede personalizar su
camuflaje según la vegetación y condiciones meteorológicas del entorno. El motor Unreal Engine 5 permite renderizar detalles como barro, lluvia y niebla en tiempo real, afectando tanto la visibilidad como el sonido. Podemos, por ejemplo, arrastrarnos por zonas húmedas para cubrirnos de barro y volvernos prácticamente invisibles desde la distancia. Además, el entorno es destructible en ciertas áreas, lo que permite crear distracciones o abrir nuevas rutas al enemigo. Se ha confirmado también la presencia de
zonas sonoras: charcos, ramas, hojas secas? todo puede delatarnos si no andamos con cuidado.
Progresión y habilidades por clase
El modo
Fox Hunt introduce un sistema de progresión por clases, con habilidades únicas para cada tipo de soldado. Por ejemplo, una clase puede desplegar drones para reconocimiento, mientras otra coloca
sensores de latido cardíaco o trampas sónicas. Conforme jugamos, desbloqueamos mejoras que podemos aplicar entre partidas, como camuflaje más efectivo o mayor resistencia a detectores térmicos. Este sistema no sólo permite una evolución constante, sino que estimula el juego en equipo: cada jugador debe asumir un rol clave en la operación.
Una tensión jugable sin descanso
La particularidad de
Fox Hunt es su constante sensación de acecho. En lugar de buscar tiroteos,
tenemos que sobrevivir sin ser detectados, y muchas veces es más inteligente observar desde la distancia, tender una emboscada o incluso dejar pasar a un enemigo si no es el momento adecuado para atacar. Esta tensión se magnifica con elementos como la
visión limitada en condiciones nocturnas, los binoculares direccionales, la interferencia de señales y el uso de comida o carnadas para atraer fauna que pueda delatar posiciones. Cada encuentro es una danza silenciosa entre cazador y presa, donde cualquier error puede ser fatal... o una oportunidad para girar las tornas a nuestro favor.